-No pretendo juzgarte, solo entenderte.
-Solo me arrepiento de lo que no he hecho.
-Ya sé que todos los hombres somos unos cabrones y que siempre os hemos tenido explotadas y etc.,etc., pero resulta que yo me plancho mis camisas y además soy tu sargento.
-La fuerza más destructiva del mundo no es el odio sino el amor, y si quieres ser un buen investigador deberías reconocerlo cuando estés ante él.
-Tenia la fuerza de quien puede empeñar su mente y su voluntad en conseguir algo, en perseguirlo sin tregua, sobre todo sin darse tregua a sí mismo.
-Criterio moral en los negocios. un hombre poco sutil como yo siente sin embargo un tremendo malestar cuando se encuentra con...
-Frívolo. No todos los hombres tenemos el cerebro lleno de semen.